Formación continua

La formación continua es algo imprescindible en el docente. Tiene mucho mérito haber aprobado la carrera, tener un máster, opositar durante un tiempo y conseguir la plaza soñada. Sin embargo, un docente está durante su vida laboral adquiriendo nuevos conocimientos que aportan mejoras a su práctica pedagógica. Por tanto, el docente desarrolla sus capacidades y habilidades para la docencia gracias a la formación continua. 

La formación continua es la búsqueda de nuevos conocimientos educativos o acciones formativas por parte del docente para mantenerse actualizado de las últimas tendencias para el entorno escolar. Los docentes profesionales y competentes en su trabajo buscan aprender algo nuevo cada día para aplicarlo en sus contenidos impartidos. De esta manera, el docente podrá aplicar las nuevas metodologías o diversas técnicas educativas actuales para responder a las necesidades del aprendizaje del alumno. 

¿Y cómo se desarrolla esa formación continua en el docente? A través de programas de aprendizaje con contenido teórico y práctico. Esta formación continua se efectúa a través de los cursos especializados en las materias que se quiera mejorar o perfeccionar en el puesto de trabajo. La formación continua puede venir dada por la iniciativa propia del docente que quiera ampliar sus conocimientos, habilidades y competencias en otras materias; o por las diversas instituciones educativas que requieran de la posesión de ciertas formaciones a los docentes.

Las características que proporciona una formación continua son:

• Renueva los conocimientos educativos
• Consolida la competitividad
• Mejora la capacidad de adaptación a las necesidades educativas especiales
• Promueve la mejora del currículum del docente

Como su propio nombre indica, la formación continua se prolonga durante mucho tiempo. Por tanto, no se determina un límite de edad para poder formarse y perfeccionar las prácticas desarrolladas en la profesión del docente. Así, todo conocimiento adquirido y que se encuentre actualizado en la materia será una ventaja para el aprendizaje del alumno. 

La formación continua potencia las especialidades y aplica nuevas técnicas y formas de enseñanza gracias a los nuevos avances de la tecnología que no para de crecer e innovar. Este punto es muy importante ya que dado el crecimiento tecnológico, es de obligatorio cumplimiento estar capacitado para manejar las herramientas y plataformas por las que se rige el entorno educativo actual.

Estas utilidades alzan la formación continua como la clave para mejorar la enseñanza y el aprendizaje. Supone aprender a utilizar software educativos, recursos online y dispositivos en el aula. Las últimas generaciones ya han nacido en la era digital y vienen bastante activos en esta área que tanto hay que potenciar. Por tanto, la formación continua en la tecnología educativa diríamos que es una obligación en la cual formarse y ayuda al desarrollo profesional del docente de manera positiva. 

Como hemos visto, la formación continua adapta las estrategias didácticas y metodológicas del docente y crea nuevas para satisfacer las necesidades educativas de todos los estudiantes. Hay que fomentar la importancia de la formación continua donde surgirán nuevas ideas innovadoras para aplicar a la enseñanza y lograr unos buenos resultados en los alumnos.