¿En qué consiste el concurso-oposición?

Descubre cómo funciona el proceso de concurso-oposición que busca lo mejor en conocimientos y experiencia para puestos de docentes.

Cuando decides comenzar a opositar y lees en qué consiste el proceso de selección, te encuentras con varios tipos: oposición, concurso o concurso-oposición. El punto central de una oposición es la igualdad donde se evalúa de forma objetiva, lo máximo posible, para que cada candidato pueda optar al puesto convocado. Es aquí donde estos tipos de procesos de selección son importantes conocerlos. Veamos el tipo de proceso de selección más completo: Concurso-oposición.

¿Qué es el concurso-oposición?

Se trata de un proceso selectivo que combina la fase de realización de diferentes pruebas teóricas y/o prácticas, y la fase de los méritos que presenten los candidatos. Estos méritos pueden ser académicos, de experiencia profesional o idiomas válidos. Es necesario saber que cada convocatoria es distinta según la oposición y puesto al que se opte.

Este tipo de proceso selectivo es utilizado en convocatorias como en el ámbito de la educación. Es un procedimiento donde se eligen a las personas más aptas para el puesto ofertado, donde se respetan los principios de igualdad, mérito y capacidad. Gracias a los méritos, los candidatos que puedan demostrar una combinación sólida de habilidades, conocimientos y experiencia, obtendrán más ventaja frente al resto de la competencia.

Objetivo del concurso-oposición

La combinación de ambas fases tiene como objetivo seleccionar a los candidatos más idóneos para las plazas disponibles de la convocatoria. Por medio de la oposición, se busca asegurar que los candidatos tengan los conocimientos y habilidades como requisitos para desempeñar las funciones del puesto de trabajo de manera efectiva.

A través de la fase de concurso, los candidatos reconocen los méritos y la experiencia previa a opositar y ser candidatos, lo que puede influir en la calificación final de los resultados. Es importante mencionar y saber, que hay que revisar detenidamente las bases y requisitos de la convocatoria a opositar ya que cada una, dependiendo de la comunidad autónoma y la rama específica, puede variar la evaluación y asignación de puntos a los méritos presentados.

Fases de un concurso-oposición

  1. Fase de oposición: Los candidatos se someten a pruebas teóricas y/o prácticas para evaluar los conocimientos y habilidades relacionadas con el área específica a la que se examinan. Esta fase puede componerse de exámenes de teoría, supuesto prácticos, cuestionarios o ejercicios de simulación. El objetivo es medir la capacidad del opositor para desempeñar las funciones del cargo al que oposita.
  2. Fase de concurso: En este punto, se evalúan la experiencia, méritos y cualificaciones del candidato. La puntuación de estos méritos la conforman los títulos académicos, la experiencia profesional antes de opositar, formación complementaria y los idiomas que posea. En esta fase, se reconoce la experiencia y logros del candidato obtenidos previamente de realizar la oposición. Son puntos muy importantes que pueden conseguir la plaza a la que se oposita.
  3. Fase de entrevista o evaluación personal: Existen en algunas convocatorias esta fase donde se examina las habilidades interpersonales del candidato o se entrevista de manera personal para extraer información más concreta y espontánea.

Algunas ventajas del concurso-oposición incluye la transparencia que supone el funcionamiento del proceso de selección, la búsqueda de candidatos que sean muy cualificados para el puesto y la imparcialidad en la selección de los posibles aspirantes.

Por otro lado, como desventaja de este proceso, hay que decir que suelen ser procedimientos largos y exigentes donde los candidatos se preparan tanto las pruebas teóricas complejas como la evaluación de los méritos.

Los méritos, parte importante del concurso-oposición

Se trata de una fase adicional que tiene el proceso selectivo de concurso-oposición. Los méritos son un conjunto de logros, conocimientos y experiencias que un candidato presenta en un proceso selectivo, como el concurso-oposición para demostrar su idoneidad y calificación para conseguir un puesto.

En este punto se evalúan la formación complementaria, participación en cursos, publicación de artículos o proyectos relevantes, experiencia previa y otros logros que demuestren que el candidato encaja con el puesto. Veamos qué méritos específicos pueden incluirse:

  • Formación académica: los títulos académicos, grados, postgrados, másters y otros logros educativos.
  • Experiencia laboral: la experiencia profesional que haya tenido el candidato en relación con el área del puesto y previamente de opositar. En este punto, el número de años, centros donde ha trabajado o responsabilidades ejercidas, pueden ser de mucha importancia para la puntuación final.
  • Cursos de formación complementaria: la participación que se haya tenido en cursos, seminarios, talleres y otras formaciones relacionadas con el puesto optado.
  • Publicaciones y contribuciones: haber publicado artículos académicos, investigaciones u otras contribuciones pueden mostrar la experiencia y conocimiento en ello.
  • Reconocimientos y premios: premios obtenidos en la carrera o menciones honoríficas.
  • Idiomas: el conocimiento en lenguas extranjeras son un mérito relevante para el puesto ya que supone destacar un mérito más del resto.

Si te interesa participar en un proceso selectivo como el concurso-oposición, te recomendamos que consultes las convocatorias y bases específicas de la oposición a la que quieras optar para opositar, y así obtendrás información más específica sobre los requisitos, etapas de proceso y fechas clave.

morayma.estrada
3 Junio, 2024